sábado, 19 de mayo de 2012

Carta a un joven estudiante de mercadotecnia

Texto de Daniel Granatta, tropicalizado por IDEXTRA
Estimado estudiante de mercadotecnia de alguna universidad mexicana:

Perteneces a una nueva generación de mercadólogos, tu edad promedio es de unos 20 años y tienes DNA digital de serie. Eres usuario digital antes que responsable de marca, y usas la tecnología de una forma tan natural que ya no distingues entre vida digital y vida analógica, puesto que tu vida es una sola. Y por ello tienes la oportunidad de ser un mercadólogo distinto a los de todas las generaciones que te precedieron.

Aprovechando que te quedan sólo dos o tres semestres para terminar tus estudios y comenzar tu carrera en el mercado laboral, va siendo hora de que hagas contactos con distintas marcas o agencias para preparar tus prácticas, incluso plantearte salir de tu ciudad para asistir a alguno de los múltiples congresos de mercadotecnia que se celebran por toda la geografía mexicana a lo largo del año, en los que aprender de las experiencias que algunos conferencistas comparten en ellos.

Aquí dejamos unos consejos para que tu estudiante podas sacar el máximo de el encuentro con un ponente:

- Eres joven y las fiestas son parte de tu vida, pero no permitas que tanta fiesta nuble tu vista ni el objetivo de por qué viajaste a un lugar lejano para asistir a un congreso; aunque estés crudo, levántate para ir a las conferencias, lo contrario no tiene perdón de Dios.

- Si algún conferencista es famoso por salir en algún concurso de televisión, por favor no te olvides de que asiste a dicho evento como alguien que hablará de  mercadotecnia, no como un famoso televisivo que necesita una corte de aduladores.

- Siguiendo lo anterior, no regales aplausos porque salga en televisión, mantén en todo momento un espíritu crítico y un cierto nivel de escepticismo, oblígalo a ganase tu atención y tus reacciones.

- No es una estrella de rock, sólo está impartiendo una conferencia sobre mercadotecnia, lo que significa que no tiene ningún sentido que te tomes una foto con él para subirla a Facebook como si fuera un trofeo. Mejor píde una tarjeta, o mejor aún, pide chamba.

- Si aún así se comporta como una estrella de rock grosera y maleducada, ténlo en cuenta aunque dedique toda su charla a contar cómo cuida la marca para la que trabaja, la marca no es lo que el diga sino lo que él hace.

- Si lleva actitud rockstar aún más allá, y es grosero y maleducado con alguien del evento, el público, o incluso la jovencita que actúa como hostess, no se te ocurra nunca enviarle un CV; si se comporta así con alguien a quien apenas conoce, imagina cómo puede llegar a ponerse si no le llevas el café a la temperatura adecuada para su gusto.

- Exige algo útil para ti como futuro mercadólogo, no te conformes con espejitos de colores y vídeos anunciados como inéditos aunque ya estén en YouTube desde hace semanas. A fin de cuentas eres público, pero mercadólogo, no público de un programa de variedades. Si te conformas sólo con espejitos estarás a merced de cualquier comercial pacheco que se vea medio bonito realizado por cualquiera de esos excéntricos creativos publicitarios.

- Pregúntale qué aporta a su marca, qué hace en su trabajo y cómo ayuda a que la parte de México de la marca que representa sea algo más que una franquicia regional. En resumen, algo que haga de su presencia en el evento algo relevante, y no algo que podría ser reemplazado por un vídeo de su presidente transnacional corporativo.

- No te creas todo lo que dice sólo porque está en el escenario y tú entre la audiencia. Todos somos audiencia y siempre hay alguien que sabe más que nosotros, así que intenta comprobar si lo que escuchaste en las conferencias es cierto o si de verdad el y/o los otros conferencistas estan completamente desfasados, algo que le suele pasar a esos profesores que esgrimen a Kotler como principio y final de todas las cosas.

- Al final de las presentaciones algunos conferencistas suelen dar su cuenta de correo electrónico. Por favor, apúntala y escríbeles. Y búscalos en Twitter y/o Facebook, por favor agrégalos y mantente en contacto. Porque si te gustó lo que contaron en la charla, entonces la charla sólo es el inicio de una relación, no sólo un evento esporádico anual.

- Mi correo electrónico no es para que envíes cadenas de e-mails relativos a que has encontrado a Jesús en la Tierra o a las últimas actualizaciones de tu Fotolo. Ah, tampoco pidas ayuda con tareas de la escuela, no tiene chiste que hagan las cosas en lugar de que las hagas tú.

- Si tienes alguna pregunta que hacer tras la presentación, no comiences diciendo que “está muy guapo” o “muy feo”. A nadie le importa, y si lo haces, probablemente no tomen en serio nada de lo que digas a continuación.

- Si ves algún conferencista en la fiesta y quieres, hablarle sin sentir pena de ningún tipo. No tiene sentido para ti viajar a otro lugar en el que estar rodeado de gente que no conoces y seguir hablando únicamente con tu círculo de amigos, cada persona que no conoces es una oportunidad de descubrir algo nuevo. Y respecto a algunos conferencistas, no van  a los eventos a conocer a otros conferencistas, sino a los que un día seran compañeros o clientes, en este caso tú.

Y, finalmente, si eres estudiante y te sientes al menos ligeramente movido por lo que acabas de leer, Comparte este texto con tus compañeros.

No hay comentarios:

Publicar un comentario